El narcotraficante Sebastián Marser figura como uno de los autores intelectuales del asesinato del fiscal Marcelo Pecci, mientras se encontraba de luna de miel en Barú, una playa ubicada a 45 minutos en lancha de Cartagena, Colombia.
La declaración de uno de los detenidos por el caso sirvió para que las autoridades colombianas, estadounidenses y paraguayas, que participan en la investigación, dieran con el perfil de este sujeto, de 31 años de edad.
Francisco Luis Correa Galeano, de 43, testificó que dos colombianos, que se dedican al narcotráfico, lo ubicaron en Medellín a petición de una persona que forma parte de una de las organizaciones más grandes del tráfico de cocaína en Paraguay.
“El dinero, la logística y la información para matar a Marcelo Pecci la habrían enviado directamente desde Paraguay”, aseguró Correa a las autoridades.
En ese país, Marser lideraba una red dedicada al narcotráfico, junto a Miguel Ángel Insfrán Galeano, que tenía un mecanismo de lavado a través de clubes de fútbol e iglesias. Fue desmantelada durante la operación A Ultranza, ejecutada en Paraguay en febrero de 2022.
Los operativos implicaron 107 allanamientos y la incautación de más de 100.000.000 de dólares, 98 inmuebles, 28 vehículos, 10 avionetas, 1 helicóptero, 12 carretas, 41 tractores, 48 motos y 7 embarcaciones, reseñó Télam.
El detonante del asesinato
Una orden de captura contra cinco de los siete hermanos Insfrán, emitida el 22 de abril de esta año, detonó la planificación del homicidio de Pecci. Ese día, resultó detenido el menor de ellos: Conrado Ramon Insfrán Villalba. Pero las autoridades de Paraguay negaron que Pecci haya hecho esa solicitud y aseguraron que no llevaba ese proceso.
Marset, también asociado al Primer Cartel Uruguayo, está prófugo de la justicia uruguaya.
Lo habían detenido en el aeropuerto internacional de Dubái, Emiratos Árabes Unidos, a finales de septiembre del año pasado. Portaba un pasaporte paraguayo falso y, dos meses después de su aprehensión, la Cancillería de Uruguay le otorgó un nuevo documento que le permitió obtener la libertad.
El subsecretario uruguayo Guillermo Maciel explicó en marzo de este año, en declaraciones al medio digital Subrayado, que cuando se concretó la entrega del pasaporte a Marset no estaba vigente el requerimiento de revisar los antecedentes penales internacionales del solicitante.
Cinco personas resultaron identificadas por su vinculación en el crimen del fiscal y los oficiales de seguridad lograron detenerlas el 3 de junio, reseñó El Tiempo. Pecci adelantaba varias investigaciones contra carteles de Brasil y clanes paraguayos, además de una causa contra un expresidente de su país.
El nacional